lunes, 17 de septiembre de 2012

EL INVENTOR

Todos los años, en el mes de agosto, se realiza una feria de inventos, en la plaza de Caseros. Siempre vamos con la familia,  el año pasado nos detuvimos en un stand asombrados.
En ese stand había un señor que invento la maquina de hacer nubes.
Son nubes particulares, porque al tocarlas transmiten sensaciones.
Se podían experimentar sensaciones cuyo punto de partida se originaban en los dedos de la mano.
Sensaciones internas, como miedo, alegría, pasión, etc. y gustativas, como dulce, salado, agrio, etc.
Después de esperar un tiempo infinito, llego mi turno:
     (mujer)- Quiero la sensación de rabia.
     (inventor)- No la tengo
     (mujer)- Tanto esperar!! Que raro, nunca sintió rabia?
     (inventor)- No. Usted?
     (mujer)- Sí. Usted vive en pareja?
     (inventor)- Si.
     (mujer)- Y su mujer ha tenido alguna rabieta?
     (inventor)- Oh si, muchas veces. Pero la dejo solita cuando aquello pasa.
     (mujer)- Y después, le pregunta, cual fue su causa.
     (inventor)- No.
     (mujer)- La quiere?
     (inventor)- Sí, es mi capullito de alelí.
     (mujer)- Ya veo como la quiere, esta moralmente aceptado no acercarse cuando hay rabieta, pero después no preguntar el origen. Que distorsión del amor!
     (inventor)- La verdad, no lo había pensado. Es que estoy tan metido en el tema de los inventos, que solo la veo a ella, durante cortos tiempos. Comparto con ella los momentos diarios, desayuno, almuerzo, merienda y cena, los cuales ella realiza. Después se dispone a limpiar, lavar, hacer la cama, a planchar y le gusta leer, pero para ello no dispone de mucho tiempo.
     (mujer)- Y no comparte el trabajo rutinario y destructivo, con su mujer?
    (inventor)- No. Siempre lo hizo ella, yo soy un desastre.
     (mujer)- Ah me imagino la rabieta de su mujer, mire mejor lo dejamos ahí. La verdad no hizo falta su nubecita de morondanga, porque ya estoy experimentando lo que le pedí.
     (inventor)- No me insulte señora, para el próximo año lo intentare, seria bueno experimentar esa sensación, ya que las demás me aburren.

Marzo de 2009 (del taller literario)




ESA MIRADA

Después de un amor no aceptado por mi madre, busque una chica de bajo perfil y tímida. A mi nueva novia la conocí en la Escuela. Al principio surgió la amistad que luego se transformo en noviazgo y casorio.
Tuvimos hijos y todo fue lindo hasta que el trabajo en donde estábamos cerró sus puertas. Entre idas y venidas todo se transformo. Sus reclamos fueron constantes. Yo sin respuestas y cerrado a cualquier solución me aboque a la no importancia.
Sin embargo sigo con mi buen porte de lancero, en el trabajo que conseguí estoy rodeado de bellas mujeres más jóvenes y dispuestas.
Mi mujer decidió quedarse en casa para estar con los niños, pero cuando llego del trabajo la verdad es otra. Sigue con sus reclamos, sus desconfianzas y yo ahí sin brindarle ninguna explicación, es que ya estoy en otra.
La verdad que cuando algo se rompe ni me molesto en arreglarlo. Ella esta bastante machacada, desarreglada. Me mintió diciendo que no fumaba y lo hacia a escondidas porque decía que respetaba a los demás para no tener que tirarle el humo en la cara.
A veces pareciera que mi mujer esta al borde de la locura, grita, se descoloca y yo ahí mirando.
Pareciera que el tiempo no ayuda, porque siempre pasa lo mismo.
De todas maneras me conformo porque en el trabajo la paso bárbaro y cuando estoy en mi casa en circunstancias pesadas la miro a mi mujer y no hago mas que pensar en las bellas mujeres que tendré cuando ella reviente.
Una vocecita dulce y cariñosa me dice –Mami, tengo hambre!.
Es que había sacrificado mis placenteros sueños, por averiguar esa mirada, socarrona, fría e intencionada del papa de mis hijos. Deseando antes de dormir ser él.

AGOSTO-2009






SIN SOLUCIÓN

El tiempo me ayudo a reconstruir el concepto de la comunicación, tan importante para la convivencia.
La experiencia a veces ayuda, otrora no.
El amor, por el que se aclama tanto, cuyo concepto se desconoce, a veces no juega ningún papel porque termina siendo un medio y no un fin.
Viendo que nada pasaba y todo lo que hablaba, el viento hacia lo suyo.
Recurrí entonces al método de la observación y tampoco me demostró nada.
En algún momento creí ver algún cambio, comprobando luego que todo era producto de mi imaginación.
Ya no soportaba tal situación, en donde la repetición era para mí la peor tortura.
Justo cuando me disponía partir…
- ¡Eh! ¿A dónde vas Maria?
- Otra vez te encuentro hablando a las fotos? (me grita un enfermero del psiquiátrico)

ENERO-2008




ADAPTACIÓN

El pasado de ellas, infancia/adolescencia, marcaba la época. Siendo el único sostén psíquico en su adultez, sus hijos.
En celdas separadas y sin opción, estaban obligadas a recluirse. Esta situación puede generar un sinceramiento o endurecimiento, a la hora de pensar en encarar la vida.
Pasado un tiempo y gracias a los grupos de autoayuda que se generaron para tal fin, comprendieron que todo es producto de algo y aunque no querían (ni en sus sueños) repetir siempre la misma historia...., la repitieron pero con distintos matices.
Exclamando y preguntando:
-“¡¿Pero entonces porque repetimos siempre lo mismo!?” Esta pregunta pudo ser el origen de un proceso de cambio y con el tiempo entendieron que evadir o no aceptar la realidad no servía para cambiar su historia.
Aquellas que aceptaron su historia, se sintieron un poco con los pies en el suelo, lo cual sirvió para adaptarse a su nuevo hábitat. De esta manera las hormigas voladoras iban perdiendo sus alas para luego tener que manejarse con las patitas.


MAYO-2007





OTRA MIRADA

Me perfora la hipocresía.
Me derrite la buena voluntad.
Me taladra la necedad.
Me ablanda la inocencia de los niños.
Me agujerea los chistes malos en momentos inoportunos.
Me deshiela cuando se sintoniza la comunicación.
Me apolilla la rutina.
Me licua la sensibilidad.
Me punza la indiferencia.
Me disuelve la música.
Me aturde la falta de respeto.
Etc. . . . . . . . . . . . . . 

JUNIO-2007




EL SHOW DEBE CONTINUAR

Hacia mucho calor y mientras viajaba en el tren, me puse casi abajo del ventilador. Se fue llenando de personas, que me desplazaba del mismo.
Pronto observé un show, que me atrapó.
En ese show vi como algunos jugaban a la escondida, otros se colgaban y oscilaban entre caer o no caer al suelo. Otros hacían piruetas y los más temerarios saltaban o se deslizaban en unas cápsulas blancas.
El tren llegó a la última estación y sonó la chicharra. Indicando mediante su accionar la puerta por cual había que bajar. En la línea Urquiza y usando como referencia la izquierda y derecha del motorman, por ejemplo cuando la chicharra suena dos veces se baja del lado izquierdo y cuando suena una vez, por el lado derecho. Al sonar la chicharra, por suerte estaba cerca de la puerta, lo único que tenia que hacer era girar.
En ese momento uno hizo una pirueta y un clavado sobre mi cabeza, pero no pude hacer nada para frenarlo.
En ese show participaron los piojos, liendres y huevos que estaban en una cabellera.
Ahora tengo un show montado en mi cabeza.

MARZO-2005




RECORRIDO EFICAZ

Quería poner fin, al miedo que sentía cuando veía una cucaracha. Una de las cosas que se me ocurrió fue dibujar y pintar a escala real, en mi pieza, varias cucarachas de distintos tamaños y ubicadas en la pared. Tanto fue mi entusiasmo que hasta en la funda de mi almohada dibuje una cucaracha.
Resulto buena la idea y hasta me divertía, ya que al entrar en mi habitación, familiares y amigos, se asustaban, porque les parecía que eran de verdad.
Pronto me acostumbre y sentía que no me asustaban tanto.
Un día me desperté a las 3 de la mañana y cuando prendí la luz vi que las cucarachas partían cada una de cada dibujo y se disparaban atolondradas, fue tan rápido que pensé que era una alucinación.
Esa situación me altero un poco y miraba con ojos angustiantes los dibujos que había hecho.
En una madrugada de mucho calor, me desperté y confirme lo que antes creía que era una alucinación. Las cucarachas partían cada una de cada dibujo. Me encontraba perdida, mis miedos renacieron. Quería deshacerme de aquellos dibujos pero algo me frenaba.
Empecé a averiguar primero por el origen de la pintura. Costo saber sus componentes. Luego de insistir me entere que la pintura estaba compuesta mayormente por restos molidos de cucaracha.
Comprendí que la obra estaba incompleta y menos mal que no elimine aquellos dibujos. Lo primero que hice fue eliminar solo el dibujo que había hecho en la funda de mi almohada. Después dibuje recorridos, y partiendo de las cucarachas dibujadas anteriormente, con lineas intermitentes y utilice la pintura pero de otro color en cuestión. Todos los recorridos terminaban en uno solo, que conducía a un tacho que en su interior había una sustancia pegajosa y con veneno.
Cada vez que prendía la luz se veía el recorrido completo de las pobres cucarachas que guiadas caían al tacho.

JULIO-2005